Mañana entramos a clases otra vez. Que lata. Ahora no voy al colegio, claro... pero igual me tengo que levantar temprano. No es justo. Me siento engañado.
Del jardín al colegio, después a la universalidad, después al eterno trabajo. Siempre hay que levantarse temprano hasta que algún día juvilemos y podamos, finalmente, levantarnos tarde. Lo único que me molesta de esto, es que para entonces, ya dormiremos menos horas y nos levantaremos igualmente temprano.
A propósito de colegios, hoy un alumno de 16 años acuchilló a su profesora de Inglés. El tipo se portaba bien, no tenía mala conducta... sólo tenía poco control con la frustración. No la manejaba. Dicho de otra manera, un niño típico de hoy, que los padres han malcriado dándole todos los gustos al extremo que simplemente no es capaz de manejar que le digan que no o que le llamen la atención.
Han cambiado los tiempos, eso está claro. Lo preocupante es que estamos produciendo ciudadanos sin disciplina (¿qué es eso?), desubicados, que no respetan a nada ni a nadie, ignorantes, que sin el google no son capaces de hacer ni una misera tarea, incluso alumnos universitarios que hacen sus investigaciones sacadas textuales de la web, que no han abierto un libro en su vida. Pero lo más grave aún, es que los profesores que están saliendo de la Universidad tampoco saben leer. En un taller para alumnos de último año que hicimos, preguntamos por poetas Chilenos, sin contar a Neruda y la Mistral... (grillos, grillos)... preguntamos por los premios nobeles de literatura y alguien nombro a Nicanor Parra... osea, esos tontones van a ser algún día los profesores de nuestros hijos... Y no estamos hablando de cabros que salieron de una escuelita rural o de una Univesidad pobre que todos sus alumnos estudian a base de créditos Universitarios o becas.
Me parece que es mucho más serio de lo que parece.