miércoles, febrero 01, 2006

Un parte en Chile...

Hoy quiero contar un tema que me afectó directamente, y que a pesar de las implicancias en mi vida cotidiana, me resulta tremendamente satisfactorio.
El asunto en si no es más que una infracción de tránsito. Un día de sol, salgo de la oficina temprano y me voy al campo, a preparar un embarque de vacas para la venta. Voy en el auto solo, escuchando una vieja canción de AC-DC que me recuerda las épocas de colegio, sin darme ni cuenta un paco apareció de la nada y me hace parar.
- Documentos, por favor....
En ese momento me doy cuenta de porque me pararon, sin tener idea a cuanto me pescaron exactamente. Empiezo a buscar mi licencia en mi billetera, y no la puedo encontrar. Inmediatamente pensé en Sofía, que a sus 2 años y medio es una experta en hacer desaparecer documentos y tarjetas de las chequeras y carteras. Luego de unos 5 minutos el carabinero medio aburrido por la espera me dice que fui detenido por transitar por sobre lo permitido y me muestra la pistola. 82 kilómetros por hora en zona de 60.
Traté de justificar la falta, pero la verdad que no existen muchos fundamentos para eso. El policía me miro con cara de yo no fui y me dijo “ He estado todo el día y no he hecho excepciones, solo hago mi trabajo”.... y me entrega la citación al 2º juzgado de policía local.
Esta es la parte satisfactoria, dentro de todo. La verdad, me da gusto que la policía en Chile funcione como lo hace. Acá, a nadie se le ocurriría ofrecerle 10 lucas a un Carabinero, no se te pasaría por la cabeza... Y eso es algo de lo que deberíamos estar orgullosos En prácticamente todo Sudamérica las cosas son muuy distintas, la policia se vende por 3 dólares en Argentina, en Perú, Bolivia mejor ni hablar. En México mi vieja vivió en carne propia cómo la policía detiene a los buses en la carretera y les roban el equipaje a los pasajeros.
Bueno, con respecto a mi parte, nunca pensé que fuera para tanto. A pesar que siempre tengo a lo menos una multa por exceso de velocidad al año, pero, la nueva ley me tenía algunas sorpresas.
Para empezar ir por sobre la velocidad permitida es ya una falta grave, y la multa es 1 UTM (Unidad Tributaria Mensual) que son unos $32.000.-. Si vas a cancelar la multa dentro de los primeros 5 días te descuentan un 25%. Lo nuevo es que eso es solo entre 61 y 81 kilómetros /hora. A partir de los 82 kl/h la falta es gravísima, y la multa varia entre 1.5 y 3 UTM más una suspensión de la licencia.
El juez me condenó a pagar el mínimo, $47.200.- y a 22 días de suspensión. Sobre esto, la secretaria del juzgado me aconsejo redactar una carta con buenos fundamentos para que el “Magistrado” me reduzca la pena a 5 días. El lunes voy a llevar la carta y veremos como nos va. Mientras tanto seguiré de pasajero en mi auto, tratando que mi mujer maneje un poco mejor de lo que ya maneja..... uno nunca sabe.

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