Como casi todos los días, un amigo me saludó en el Messenger…
- Hola…. Estás??
- estoy… que cuentas?
- Nada… estoy de cumpleaños
- Felicidades!!! Cuántos son?
- 30
- jajaja treintón…. Y cómo va el día??
- Mmm
- ¿?
- No importa.
- Jajajaja cambio de folio
- Si, claro.
- Te noto medio bajón.
- Treinta, weon, treinta…
La famosa crisis de los treinta. Siempre pensé que era una tontera. Una crisis inventada para justificar algo, para tomarte una semana de vacaciones o de una licencia médica dada por alguna Doctora Cordero, que sé yo.
Pero resulta que no. Es un tema bastante más complicado de lo que uno se imagina. No es necesariamente un problema por envejecer, no son solo los años.
Esta crisis se da, generalmente, en clases medias-altas para arriba. Gente que en la universidad que estudió carreras largas o que trabaja simplemente en medios muy competitivos.
En el caso del hombre son cuestionamientos sobre los logros obtenidos; porque todavía no te alcanza para la casa que quieres, la que te alcanza no te gusta o de frentón no te alcanza, no tienes la seguridad laboral que deberías tener o que tus amigos están ya casados con hijos y tu no tienes para cuando. Las mujeres, además comienzan a cuestionar su maternidad con respecto a su trabajo. Incluso estás por dejar de ser Adulto Joven, y nunca te enteraste que habías entrado a esa categoría… Un amigo dice que el tiene presupuestado vivir hasta por lo menos los 70 años, 35 sería la mitad de su vida. Bueno, para los gringos esta es la crisis de la mitad de la vida, “midlife crisis” Pero para muchos es que tienes treinta, es que ahora eres un treintañero. Es como una palabra maligna, la pronuncias y te duele la guata…. y te termina dando estrés.
Una amiga de treinta y tantos decía que a ella le llegó la crisis a los treinta y tres, un domingo en la mañana. Y que le pegó tan fuerte que si se descuida, en cualquier momento le empalma con la de los cuarenta.
Me di cuenta que para algunos o no hay solución o no hay como enfrentarlo. Si no es una es la otra. Hay personas más propensas a vivirse todas las crisis que nos ofrece el mercado. No es mi caso, claro. A mi me faltan como 8 meses para los treinta y la verdad que ni siquiera pienso en eso. Además nunca me preocupó mucho cumplir años… ¿cierto?
- Hola…. Estás??
- estoy… que cuentas?
- Nada… estoy de cumpleaños
- Felicidades!!! Cuántos son?
- 30
- jajaja treintón…. Y cómo va el día??
- Mmm
- ¿?
- No importa.
- Jajajaja cambio de folio
- Si, claro.
- Te noto medio bajón.
- Treinta, weon, treinta…
La famosa crisis de los treinta. Siempre pensé que era una tontera. Una crisis inventada para justificar algo, para tomarte una semana de vacaciones o de una licencia médica dada por alguna Doctora Cordero, que sé yo.
Pero resulta que no. Es un tema bastante más complicado de lo que uno se imagina. No es necesariamente un problema por envejecer, no son solo los años.
Esta crisis se da, generalmente, en clases medias-altas para arriba. Gente que en la universidad que estudió carreras largas o que trabaja simplemente en medios muy competitivos.
En el caso del hombre son cuestionamientos sobre los logros obtenidos; porque todavía no te alcanza para la casa que quieres, la que te alcanza no te gusta o de frentón no te alcanza, no tienes la seguridad laboral que deberías tener o que tus amigos están ya casados con hijos y tu no tienes para cuando. Las mujeres, además comienzan a cuestionar su maternidad con respecto a su trabajo. Incluso estás por dejar de ser Adulto Joven, y nunca te enteraste que habías entrado a esa categoría… Un amigo dice que el tiene presupuestado vivir hasta por lo menos los 70 años, 35 sería la mitad de su vida. Bueno, para los gringos esta es la crisis de la mitad de la vida, “midlife crisis” Pero para muchos es que tienes treinta, es que ahora eres un treintañero. Es como una palabra maligna, la pronuncias y te duele la guata…. y te termina dando estrés.
Una amiga de treinta y tantos decía que a ella le llegó la crisis a los treinta y tres, un domingo en la mañana. Y que le pegó tan fuerte que si se descuida, en cualquier momento le empalma con la de los cuarenta.
Me di cuenta que para algunos o no hay solución o no hay como enfrentarlo. Si no es una es la otra. Hay personas más propensas a vivirse todas las crisis que nos ofrece el mercado. No es mi caso, claro. A mi me faltan como 8 meses para los treinta y la verdad que ni siquiera pienso en eso. Además nunca me preocupó mucho cumplir años… ¿cierto?
Y a usted… ¿ le importa o le importó cumplir treinta?
2 comentarios:
Igual me falta su resto, pero creo que depende del estado en el que se encuentre mi vida para saber la fuerza de la crisis... Los veintitantos son espectaculares... Los treintitantos deben serlo también... Son etapas.
Yo me cuestiono constantemente mis logros mis metas y creo que cada año que pasa me ayuda a acercarme a lo que quiero.
Incluso he estado pensando en la maternidad y en que no me gustaría que mis hijos me vieran vieja (mi madre me tuvo a los 40)
Vivo con el peso de los años encima.... espero llegar a los 30.
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